Este verano pasamos unos cuantos días en la República Checa, más concretamente en Praga.
Esta ciudad, fundada a finales del siglo IX, es la capital y la mayor ciudad de la República Checa, así como la capital de la región de Bohemia. Situada en las orillas del río Moldava, tiene aproximadamente 1,2 millones de habitantes. Su moneda no es el Euro, ellos usan las coronas checas, (1 € aproximadamente son 27 coronas checas).
Famoso Reloj Astronómico
Praga es una ciudad con una amplia agenda cultural, son frecuentes los conciertos de música clásica, las óperas, los museos, los teatros (en particular uno muy especial llamado teatro negro). También es hermoso recorrer la ciudad vieja (Stare Mesto), tumbarse al solecito en la isla de Kampa (uno de mis lugares favoritos), atravesar el famosísimo puente Carlos y pararte a escuchar a alguno de esos músicos ambulantes que alegran con sus notas el día, pasar el día visitando el enorme castillo y perderte por él entre sala y sala.
Vista del Puente Carlos
En Praga los amantes de la cerveza pueden disfrutar de ella, hay más de 300 tipos y es más barata que el agua (como curiosidad la república checa es uno de los países dónde más cerveza se consume del mundo). También tienen una rica gastronomía (El gulash de carne de vaca con Knedlik, y el solomillo con salsa de nata con Knedlik son dos de sus platos preferidos).
Isla de Kampa Por cierto, no necesitas muchos días para visitar Praga, con 4 días es más que suficiente para recorrer los lugares más bonitos y quedarte prendado como yo de esta ciudad centroeuropea.
1 comentario:
Personalmente, para mí ha sido genial descubrir Praga al lado de gente tan estupenda. He conocido a gente nueva, especialmente a Raquel.
Es estupenda, creo que Jose Luis me dará la razon.
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